Chips & Dips: Chips de Espárragos con Dip de Yogur

Esta es una divertida y sencilla entrada, ideal para un día de fiesta y en la que podemos disfrutar, de un modo diferente, de esta maravillosa temporada de espárragos. Para su elaboración solo necesitaremos unos buenos –y frescos– espárragos blancos, un poco de harina, un yogur y las especias favoritas con las que queramos aromatizarlo. Y esto, combinado con un poco de paciencia y un buen punto de fritura, nos dará como resultado una entrada -o aperitivo, o merienda– sorprendente y muy primaveral.

Antes de empezar con los ingredientes y la receta propiamente dicha, un par de consejos. Si os gusta realmente el sabor de los espárragos crujientes, en lugar de laminarlos con el pelapatatas, cortalos longitudinalmente por la mitad y de nuevo estas mitades en dos; el resultado es mucho más sabroso –más de espárrago frito, pero menos de chip-. El aliño de la salsa para acompañar los fritos –el Dip– depende del gusto de cada cual, pero mi recomendación es que ha de resultar refrescante –yogur, hierbabuena, ajo fresco, etc.– para contrarrestar la fritura. Por último, podéis preparar la tempura en casa –en realidad una buena harina tamizada con agua muy fría es suficiente– o, como en este caso utilizar una harina especial preparada; simple cuestión de comodidad. Así que vamos con los pocos ingredientes que vamos a necesitar:

• Tres o cuatro Espárragos Blancos frescos  de calibre medio o grueso –es fundamental que sean muy fresco y nada leñosos o huecos-.
• Harina de Tempura –o sus ingredientes; harina, yema de huevo y sal-.
• Aceite de Oliva Virgen Extra.
• Sal Gruesa y Azúcar

Para mi dip -o salsa- utilizo:

• Un Yogur de estilo Griego o Búlgaro.
• Un diente de Ajo.
• Unas hojitas de Hierbabuena y Perejil.
• Media cucharadita de Mostaza de Dijon –variar u omitir en función del gusto de cada cual-.
• Una punta de Pimiento Rojo Picante seco –de Espelette, en este caso-.
• Un par de cucharadas de Aceite de Oliva Virgen Extra.
• Una de cucharada de Zumo de Limón recién exprimido.
• Sal y Pimienta recién molida.

Para comenzar preparamos el dip de modo que los sabores tengan tiempo de mezclarse correctamente. Para ello juntamos todos los ingredientes en un bol, batimos hasta obtener una masa homogénea –más o menos– y lo dejamos reposar en la nevera a fin de obtener un buen contraste final de sabores y temperaturas.

Vamos con los espárragos: procedemos a hidratarlos y limpiarlos como ya comentábamos en esta entrada. Una vez bien limpios e igualados, los laminamos con la ayuda del pelapatatas desechando las primeras láminas –que pueden resultar demasiado estrechas-. Cortamos las yemas de los espárragos por la mitad y dejamos escurrir bien todas las piezas sobre papel absorbente. Mientras tanto preparamos la mezcla de la tempura con medio vasito de agua muy fría –tenerla unos minutos en el congelador es una buena idea-. La textura final ha de ser ligeramente fluida sin preocuparnos por si  queda algún grumo, le da más carácter –y queda más crujiente-. Para acabar con los preliminares, calentamos el aceiten una sartén o cazuela pequeña.

Una vez que el aceite haya alcanzado una temperatura correcta –unos 160ºC– comenzamos a pasar las láminas de espárrago –que habremos sazonado y azucarado muy levemente– por la tempura, dejando que escurra el exceso. Comenzamos a freír las láminas en tandas breves para que la temperatura del aceite no descienda bruscamente. Una vez presenten un bonito color dorado, vamos reservándolas sobre un papel absorbente hasta completar todas las piezas –lógicamente las puntas necesitarán algo más de tiempo de fritura-.

Finalmente pasamos los Chips de espárrago a una fuente o plato de presentación, y los acompañamos con su Dip de yogur en el que los untaremos –o no, a gusto de cada comensal-. Y esto es todo, ya solo falta disfrutar de esta divertida entrada con una buena bebida fresca y una buena conversación. Así que, como siempre, que ustedes lo disfruten y… bon appétit!