Se me acumula el trabajo. A la escasa actividad de este blog –más por falta de tiempo que de interés o ideas-, se viene a sumar estos días la celebración de nuestro cuarto cumpleaños. Tal vez, y como en otras ocasiones, debería haber seleccionado una receta especial por su carácter, ingredientes o historia pero no va a ser así. No es que la receta que os anoto a continuación no sea especial –que lo es-, ni que carezca de historia –como podréis comprobar unas líneas más adelante-. Ni tan siquiera que no haya colmado las expectativas que había depositado en ella –como en todas y cada una de mis recetas o reinterpretaciones, prometido-. No. La receta que hoy os traigo es de una sencillez…