Vamos muy rápidamente con una entrada un tanto diferente y que funciona a la perfección como aperitivo, pintxo o ensalada festiva, fresca, intensa y sabrosa.
Pero antes de entrar en materia un par de apuntes sobre la receta. La primera de ellas es que la idea se basa en un pintxo clásico de uno de los grandes bares de San Sebastián –y del que ya sabéis soy súper fan-; el Bar Bergara –aquí tenéis el enlace a su web y aquí mi breve comentario-.

El segundo aspecto a señalar es que si bien en su versión original la receta se elabora con pimientos del Piquillo, yo he probado a prepararla con otros tipos diferentes –como los de Torquemada, Palencia, en este caso– y la receta sigue funcionando a la perfección con la variante de sabor-dulzor-intensidad-ahumado particular que aporta cada tipo de pimiento –chile o ají-.
Estos son los ingredientes que vamos a utilizar para su elaboración:
- Un bote de unos 300g. de Pimientos rojos asados de calidad –Piquillos, Torquemada, etc.-.
- Unos 50 g de Anchoas en Aceite de Oliva –también de calidad-.
- Dos dientes de Ajo Negro.
- Media cucharadita de Jarabe Balsámico –o de reducción de Aceto Balámico-.
- 50 gramos de Queso de Idiazabal –sin ahumar y semicurado-.
- 100 gramos de Nata –35% materia grasa-.
- Dos rodajas de Pan tradicional o semillas.
- Unas ramitas de Perejil fresco.
- Una pizca de Pimiento de Espelette en polvo –Piment d’Espelette-.
- Un par de cucharadas de Aceite de Oliva Virgen Extra.
- Un par de cucharaditas de Azúcar Moreno.
- Sal y Pimienta al gusto.

Comenzaremos por preparar la crema de queso de Idiazabal. Trocemos finamente el queso y lo batimos con unos 75 gramos de nata hasta obtener una mezcla homogénea. Pasamos esta mezcla a un cazuela, incorporamos el resto de la nata y una pizca de Pimiento de Espeltte –opcional– y hervimos durante unos segundo sin dejar de remover hasta que la textura sea totalmente uniforme y sin ningún tipo de grumos. Pasamos esta crema a un bol y reservamos al frío hasta el momento de emplatar –ha de volver a solidificarse-.

Continuamos por el secado de los pimientos –me gusta retirar la humedad de la salmuera del envasado, sobre todo si son carnosos, pero también se pueden preparar sin necesidad de dar este paso-. Colocamos los pimientos en una fuente de horno, salpimentamos suavemente, espolvoreamos un par de cucharaditas de azúcar moreno, regamos con parte de su salmuera de conserva y horneamos a unos 160ºC durante unos 30 ó 4o minutos -en función de la cantidad de carne del pimiento y su anterior punto de asado-. Retiramos de la fuente, escurrimos y reservamos.

Pasamos los pimientos, las anchoas, los dos dientes de ajo negro y las hojas de perejil –desechamos ramas y tallos– a una tabla de corte y comenzamos a picar todos los ingredientes hasta obtener una picada media, no pastosa y uniforme. Dejamos reposar durante unos minutos en un colador para extraer los restos de agua y aceite, incorporamos el jarabe balsámico, volvemos a remover y nos disponemos a presentar.

Podemos presentar en forma de ensalada, en un bol o plato hondo común, acompañada por tiras de pan tostado ligeramente engrasadas con aceite de oliva –o mantequilla– y la crema de queso de Idiazabal y que cada comensal aliñará a su gusto o bien en forma de bocados o pequeñas porciones individuales –pintxos al fin y al cabo-.

Para este segundo caso cortamos el pan –sin corteza– en pequeños cuadrados de unos 3 centímetros de lado y lo tostamos ligeramente. Colocamos sobre cada uno una cucharadita de la ensalada y rematamos con una punta de crema de Idiazabal. Podemos acompañar el plato con una quenelle de queso para quien prefiera intensificar su sabor y aroma. Y esto es todo, ya solo falta descorchar una refrescante botella de rosado –navarro, por supuesto– y disfrutar de esta intensa, salina y refrescante ensalada de pimientos y anchoas con aroma de ajo negro y queso de Idiazabal. Que ustedes lo disfruten y, como siempre… bon appétit!
Madre mía, ¡menudo bocado! Como siempre, me has dejado hambrienta y alucinada. ¡Menudos platazos haces!.
Besos
Me gustaMe gusta
Muchas gracias Carmen! Es una entrada o aperitivo muy sabroso y muy fácil de preparar. A ver si te animas a hacerla y nos cuentas 😉 Muchas gracias de nuevo y besitos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Últimamente voy como las locas y hacía mucho que no pasa por aquí. Que maravilla de pintxo Antxon, guarda unos poquitos que voy volando 😉
Un abrazo compañero!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Oído cocina! Marchando otro platito de pintxos 😉 Muchas gracias y, cuando quieras, ya sabes donde estamos. besitos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Que buenísimo, ejemmm yo también me apunto, llamo al mensajero ahora mismo jejeje, que bocao ummmm
Me gustaMe gusta
Bueno, a este paso me veo montando un servicio de Tele-Pintxo rápidamente;-) Muchas gracias Maribel, besitos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Pimientos asados de calidad… Esos en mi casa, son los que hago yo 🙂 No por darme el pisto, sino porque en Madrid ese concepto simplemente no existe salvo que quieras empeñar el hígado para pagarlos xD
Suerte que haciendo el pan en casa, el horno se enciende cada tres días y siempre hay sitio para dos pimientillos al lado del pan, que tampoco le molestan ni le dan sabor… porque los de bote… uuuuuuuuuuuuuffffffffffsssssssssssss horror…
Pero sí, aquí estas cosas no se aprecian. Anchoas igual hay más, pero tampoco para matarse…
Me gustaLe gusta a 1 persona
Jajaja!. De verdad que yo también preparo los pimientos asados o, en su defecto, cuento con los que me traigo del pueblo de mis suegros, en la Ribera Navarra y asados al aire y con leña. Pero no quería complicar una receta que es muy sencilla con excesivos pasos previos; no ando muy sobrado de tiempo y, además, estamos en agosto 😉 Y de las anchoas mejor no te cuento nada, esto es el cantábrico y siempre hay alguien con la delicadeza suficiente como para regalarte un bote –o botecito– de estas delicias en versión casera. C’est la vie! 😉 Muchas gracias Ana!
Me gustaMe gusta
Que bocadito más bueno!! Ñam! jeje
Me gustaLe gusta a 1 persona
Ya lo creo que sí, y facilito y rápido de preparar 😉 Muchas gracias Ana!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Magnífica receta. Un besito.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Te lo agradezco muy sinceramente Inma. Ya sé que los ingredientes no son de tu gusto pero te garantizo que es una estupenda entrada 😉 besitos!
Me gustaMe gusta
Si es que no gustarme el queso y el pimiento … Eso es ser rara :((
Pero si algún día tengo invitados la prepararé :))
Bsitos :))
Me gustaLe gusta a 1 persona
Jajaja! Más que rara digamos… difícil 😉
Puedes probar a hacerla sustituyendo los pimientos por tomates bien maduros y asados –sin piel ni pepitas-. Lo del queso es más complicado aunque un buen alioli podría funcionar. No es lo mismo pero seguro que en tus expertas manos queda buenísimo 😉 +besitos
Me gustaLe gusta a 1 persona
Ohhhh, muy buena idea ;D ese alioli tuyo con perejil y anchoas , ummmm
Bsitos !
Me gustaLe gusta a 1 persona
Eso es. Pero no le pongas anchoas que la picada ya las lleva 😉 +besitos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Ok , ¿Ves? Siempre aprendiendo de ti :)) muchas gracias ;D
Me gustaLe gusta a 1 persona
Exquisito Antxon, me encanta, solo puedo pedirte que prepares unos 50 bocaditos, los empaquetes y me los envíes directitos a casa… me vendrían de lujo… y si no los puedes enviar montados… no pasa nada, yo aquí ya los termino… jajajaja un besote!!! No te pierdas!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Jajaja! Venga Ligia, que esta receta es más sencilla y rápida que doblar un folio 😉 Muchas gracias, intento no perderme, aunque últimamente me está resultando un tanto complicado! 😉 besitos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Pasa que estoy de vacaciones y entre mas tiempo tengo… mas pereza me da de cocinar no se porque razón… Necesito volver a pillar el ritmo, pero definitivamente no me lo pienso perder… 😉
Me gustaLe gusta a 1 persona
De vacaciones y con la receta del mes preparada… definitivamente eres mi heroína! 😉 Disfruta que ya volverá el largo invierno y los días cortos +besitos!
Me gustaLe gusta a 1 persona