O, dicho de otro modo, verduras de temporada asadas al aroma mediterráneo. Un plato ideal para esta época del año, que puede ser consumido tanto en frío como en caliente y servirse bien como acompañamiento -de unas carnes o pescados a la brasa, por ejemplo-, o bien como entrada. Los ingredientes utilizados en su elaboración son prácticamente los mismo que podemos emplear para preparar un pisto -en sus innumerables variante- o la conocida Ratatouille francesa y es en la preparación -absolutamente sencilla- y presentación dónde hallaremos las diferencias.

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Dicen que un buen Tian ha de ser un plato lleno de harmonías de sabores y colores. Y es que para un buen resultado, es fundamental -además de contar con las mejores verduras- disponerlas de modo que creen un festival cromático de negro, blanco, verde y rojo o, lo que es lo mismo, berenjenas, cebolla, calabacín y tomate. Y ya que he comenzado a enumerar los ingredientes, vamos con todo lo que necesitaremos para poder disfrutar de esta sencilla delicia de verano;

  • Tres Tomates.
  • Tres Calabacines.
  • Dos Cebollas.
  • Dos Berenjenas.
  • Un diente de Ajo -que pueden ser más, dependiendo del gusto de cada quien -.
  • Una ramita de Tomillo –fresco a ser posible-.
  • Aceite de Oliva Virgen Extra.
  • Sal y Pimienta al gusto.

Comenzamos por precalentar el horno a unos 160ºC. A continuación lavamos, secamos y troceamos en rodajas de tamaño similar todas las verduras y las reservamos. Tomamos una fuente de horno, la engrasamos con un pequeño hilo aceite y comenzamos con el montaje. Para ello vamos alternando las diferentes verduras en orden -berenjena, cebolla, calabacín, tomate por ejemplo- y repetimos la secuencia hasta terminar la fila -o vuelta en caso de utilizar, como es tradicional, una fuente redonda-. Repetimos la operación hasta completar la fuente.

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Picamos finamente el ajo y lo esparcimos, junto con el tomillo, sobre las verduras. Salpimentamos abundantemente, regamos el conjunto con un buen chorro de aceite de oliva y horneamos durante unos 90 minutos vigilando que las verduras ni se sequen en exceso -han de mantener una cierta humedad- ni se tuesten demasiado -si es necesario podemos acabar la cocción cubriendo la fuente con papel aluminio-.

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Y ya solo nos queda decidir si vamos a disfrutar de nuestro Tian como plato, como acompañamiento, en frío o en caliente. En cualquier caso el resultado está garantizado por la explosión de sabores y colores que llenaran nuestra mesa con un plato sano, ligero y tan sencillo de preparar como exquisito de degustar. Un buen Rosado de la Provenza, fresco, ligero y redondo ha de ser el acompañamiento ideal para esta inmersión en los sabores del verano mediterráneo. Bon appétit!