
Otra delicia del mar; unos frescos, minúsculos -pero legales- salmonetes de roca, un poco de sal gruesa, una ligera capa de harina especial para freír y a la sartén! El resultado es, sencillamente, magistral; crujientes por fuera, jugosos por dentro y con un aroma capaz de trasladarnos a la orilla del mar. De cualquier mar.
Etiquetado:Fotografía, Fritos, Salmonetes
Madre mía! Qué pinta! Qué color! Y justo lo tengo que ver a las 14 horas… que hambre!
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🙂 Síiiiii, es un problema esto de trastear con la cocina a todas horas… el hambre nunca desaparece! Feliz tarde!
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que aproveche!!
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Muchas gracias! La verdad es que los hicimos ayer como entrada y estaban buenísimos 😉
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Que rico!!! Si no es molestia, nos quedamos y te animamos a visitar nuestro blog, y si te gusta, quedarte ; )
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Muchas gracias! Y de molestia, nada, todo un placer 😉 Bienvenidos y hasta la cocina!
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Con que poco se puede disfrutar de algo tan bueno.
Bss.
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Y de verdad además! 😉
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